Zadkiel es el del séptimo . Junto con su , Santa Amatista, y los es de la presta servicio a la humanidad desde el Templo de la Purificación. Este templo, que una vez fuera físico, se encuentra actualmente en el sobre la isla de Cuba. Allí los sacerdotes del de la Atlántida recibían su preparación en la orden del señor Zadkiel; su servicio a la vida atrajo el que evitó que la isla se hundiera.
Los arcángeles Zadkiel y Amatista encarnan la , la , la transmutación, el perdón y la justicia divinos, las mismísimas cualidades encarnadas por y su llama gemela. Su trabajo tiene correspondencia con el de la sede del alma y su color es el violeta. El día del séptimo rayo es el sábado, lo cual significa que ese día podemos recibir una mayor emisión de , energía y desde el de Zadkiel y Amatista.
El nombre Zadkiel significa “justicia de Dios”. En la tradición rabínica, Zadkiel es conocido como el ángel de la benevolencia, la misericordia y la memoria. En algunas tradiciones él es el ángel que detuvo la mano de cuando éste iba a sacrificar a su hijo Isaac. Amatista, el complemento divino de Zadkiel, fue uno de los ángeles ministradores de en el huerto de Getsemaní.
En su , el arcángel Zadkiel prepara a los hijos de Dios para convertirse en sacerdotes y sacerdotisas de la Orden de . En los tiempos de la Atlántida, tanto Jesús como Saint Germain estudiaron en el retiro de Zadkiel, y éste los ungió sacerdotes de esta orden.
Zadkiel y Amatista están aquí con una finalidad: ayudarnos a alcanzar nuestra libertad individual para que cuando seamos libres podamos liberar nuestro hogar, nuestra ciudad, nuestro país, nuestro planeta. El obstáculo principal para nuestra libertad es nuestro negativo. Podemos transmutarlo con los decretos de llama violeta. También podemos transmutarlo enviando amor divino y amor humano compasivo, así como invocando la ley de la misericordia y el perdón.
El arcángel Zadkiel describe lo que él y las huestes ascendidas ven cuando un devoto de Dios invoca el fuego sagrado de la llama violeta:
Vemos desde niveles internos el enorme esfuerzo que hacéis para transmutar capas y más capas de karma que habéis hecho en esta vida y en vidas pasadas. Lo que observamos es algo realmente maravilloso. En un momento os encontráis rodeados de toda clase de pensamientos negativos girando en vuestra aura. ¡Al momento siguiente tomáis la decisión de invocar la llama violeta!
¡Y he aquí que el gran poder del séptimo rayo, como un gigantesco electrodo de energía cósmica, comienza a formarse alrededor de vuestra persona! Los ángeles de llama violeta se reúnen a vuestro alrededor. Con las palmas extendidas, dirigen un arco de fuego violeta que atraviesa vuestros cuatro cuerpos inferiores y el . Cuando ese arco se proyecta por todo vuestro ser, vaporiza las condiciones negativas, ¡que literalmente desaparecen del corazón y de la mente!
Zadkiel se refiere a la llama violeta como el solvente universal que los alquimistas han buscado en todos los tiempos. “Poseo en mi corazón los secretos de la alquimia —nos dice—. Invocadlos, si así lo deseáis. Y os los entregaré como respuesta a vuestro llamado.”
La llama violeta también puede dar un estímulo físico. Zadkiel y Amatista nos dicen:
¿Por qué habríais de esperar a que la vela de vuestra vida se vaya apagando? Podéis recargar vuestro cuerpo con la llama violeta. ¿Creéis que Dios es incapaz de vitalizar los átomos, las moléculas y las células de vuestro cuerpo? ¡Él puede inundarlos de fuego violeta y daros el resplandor de la juventud eterna!
Saint Germain nos dice que la alegría es el motor de la vida, y que la llama violeta es el combustible. El perdón y la misericordia son cualidades de esta llama. Para recibir el mayor beneficio de su poder de transmutación es importante mandar llama violeta a todos aquellos con quienes hayamos sido injustos, retrocediendo tanto como podamos recordar en esta vida. Y si no sabemos dónde se encuentra la persona, escribámosle una carta pidiéndole perdón y luego quememos la carta. También debemos dar la llama violeta para todos los que hayan sido injustos con nosotros, de forma que el perdón vaya en los dos sentidos. ¡Arrojemos todos las heridas y las aflicciones a la llama violeta! Después, dejemos ir la causa, el efecto, el registro y la memoria de esas heridas y esas aflicciones. E invoquemos la ley del perdón.
Los ángeles pueden crear milagros en nuestra vida, pero nosotros debemos llamarlos a que actúen en ese sentido. Zadkiel explica que, de acuerdo con la , los ángeles no pueden interceder en los asuntos de los hombres a menos que la gente les ofrezca oraciones y les dé tareas concretas. En este momento hay ángeles esperando sus instrucciones. Esta ley se basa en el reconocimiento del por parte de nuestro Dios Padre-Madre. A no ser que pidamos a Dios que interceda por nosotros, Él, debido a Su propio decreto, no quiere quebrantar esa alianza de libre albedrío y entrar en nuestra vida sin ser invitado, y no lo hará.
Zadkiel nos dice:
Cuando invocáis la luz de nuestras legiones de llama violeta, sabed que millones de ángeles del séptimo rayo responden a vuestro llamado inmediatamente. Todos los días vemos la subida, la caída y la mengua de la marea del karma del mundo cuando los de todo el mundo invocan la llama violeta y, por tanto, mitigan los efectos del karma de las masas.
¿Cómo podemos ser eficaces y crear milagros para cambiar las condiciones del mundo?
Las legiones de luz de llama violeta son guerreros del que pueden afrontar cualquier condición del planeta Tierra. Somos los refuerzos… más cercanos a la octava física porque la llama violeta es la llama más física.
En segundo lugar, seamos especificos. Zadkiel y Amatista nos dicen:
El mundo está lleno de muchas injusticias. Examinad el panorama mundial y determinad por qué causas merece la pena luchar. Elegid una o dos, y luego trabajad en ellas sin descanso con vuestros decretos de llama violeta, vuestras meditaciones y participación activa en la mitigación de las cargas de vuestras ciudades. Uníos a otras personas para hacer decretos de llama violeta con el fin de salvar nuestra civilización.
En respuesta a vuestro llamado, nosotros enviamos misiles de llama violeta para salvar a la Tierra. Escuchad bien, ¡con Dios todas las cosas son posibles
En tercer lugar,
los santos en encarnación deben anclar la intercesión divina en la Tierra mediante la saturación de su aura de llama violeta. Ésta es la forma de marcar la diferencia para cambiar la profecía negativa en profecía positiva para el mundo.
El Señor nos dice que los milagros son la alquimia del rayo violeta y el regalo de Saint Germain. El moméntum de la llama violeta que desarrollemos en el aura a medida que decretemos, día tras día, sin falta, nos permitirá construir un almacén de llama violeta que estará a nuestra disposición en los momentos de emergencia, justamente cuando necesitamos un milagro. Cuántas veces nos hemos oído decir, o a otra persona: “¡Dios mío, necesito realmente un milagro ahora mismo!”
Un milagro es una transmutación repentina. Y la transmutación repentina tiene lugar porque alguien en el universo ha reunido suficiente luz, suficiente llama violeta para inyectar ese moméntum, un cociente de energía tal que la llama violeta aplicada a un problema específico produce el cambio instantáneo en el plano etérico, el plano mental, el plano emocional y el plano físico.
La última clave que nos da Zadkiel es que nos involucremos:
La puerta abierta hacia la luz en la octava física sois vosotros… es el poder de la para protestar, manifestarse, decretar. Orad ante el altar y después id a defender vuestra postura en todos los ámbitos de la vida en los que la vida se vea amenazada. Vosotros sois la puerta abierta a la seguridad y la salvación en la Tierra.
Mediante el cristal de amatista, la llama gemela del Señor Zadkiel concentra el aspecto materno de la libertad para las evoluciones de este planeta. Todos los que prestan servicio en el séptimo rayo y sus devotos llevan sobre sí la amatista. Todas las joyas son en realidad precipitaciones o condensaciones de la llama que esa joya concentra. Así, la amatista es el foco de la llama de la libertad; y las joyas que han sido consagradas por los portadores de luz contienen en el centro una réplica de la llama que representan.
La clave musical de Santa Amatista es El bello Danubio azul, de Johann Strauss.
El bello Danubio Azul - Johann Strauss
© Summit University Press
Beloved Zadkiel and Amethyst
Beloved Zadkiel, beloved Amethyst
Come with your legions of violet-flame angels
Who stand in the heart of the flame
Amados Zadkiel y Amatista
Amado Zadkiel, amada Amatista,
venid con vuestras legiones de ángeles de llama violeta
que se encuentran en el corazón de la llama
Who stand in the heart of the flame
Hail, Ο freedom flame!
que se encuentran en el corazón de la llama
¡salve, oh llama de la libertad!
Beloved Zadkiel, beloved Amethyst
Come with the sign of the cross of Saint Francis
And of Saint Germain
Amado Zadkiel, amada Amatista,
venid con la señal de la cruz de san Francisco
y de Saint Germain
Ye of the seventh ray
Ye of the seventh ray.
ustedes los del séptimo rayo
ustedes los del séptimo rayo.
Bring forth the jewel, the crystal, the amethyst
Bring forth the message of priests and priestesses
Traed la gema, el cristal, la amatista
traed el mensaje de sacerdotes y sacerdotisas
Of the cathedral of sacred fire
Beloved Zadkiel, beloved Amethyst.
de la catedral del fuego sagrado
Amado Zadkiel, amada Amatista.
Let the Light flow from the Royal Tetons
From Omri-Tas and the Violet Planet
Dejad que la Luz fluya desde los Tetones Reales
de Omri-Tas y el Planeta Violeta
And from the Elohim Arcturus and Victoria
Let Light flow, let Light flow.
y de los elohim Arcturus y Victoria
que fluya Luz, que fluya Luz.
Ο Zadkiel, stand on the side of the West today
Release the Light
The Light of ten thousand suns, we pray!
¡Oh, Zadkiel, colócate del lado del Occidente este día
emite la Luz
la Luz de diez mil soles, te suplicamos!
Legions of angels of Ancient of Days
Stand with the legions in purple array
Legiones de ángeles del Anciano de Días,
colocaos con las legiones ataviados de púrpura
Refrain :
Intensify! Intensify!
Intensify the Light, Ο Zadkiel today.
Intensify! Intensify!
Intensify the violet flaming flame
The violet flaming flame.
Refran:
¡Intensificad! ¡Intensificad!
Intensificad la Luz, oh, Zadkiel, este día.
¡Intensificad! ¡Intensificad!
Intensificad la llama violeta flameante,
La llama violeta flameante.
Violet-flame angels
Tending the flame of the sacred fire
Release the Light
Of freedom flame we pray, we pray!
Ángeles de llama violeta
que cuidan la llama del fuego sagrado,
emitid la luz
de la llama de la libertad, os pedimos. os pedimos
Come, Angel Deva of the Jade Temple
Come with your gifts of healing today.
Ven, Ángel Deva del Templo de Jade,
ven con tus dones de curación este día.
Refrain :
Intensify! Intensify!
Intensify the Light, Ο Zadkiel today.
Intensify! Intensify!
Intensify the violet flaming flame
The violet flaming flame.
Refran:
¡Intensificad! ¡Intensificad!
Intensificad la Luz, oh, Zadkiel, este día.
¡Intensificad! ¡Intensificad!
Intensificad la llama violeta flameante,
La llama violeta flameante.
Beloved Zadkiel, beloved Amethyst
Come with your legions of violet-flame angels
Who stand in the heart of the flame
Amado Zadkiel, amada Amatista,
venid con vuestras legiones de ángeles de llama violeta
que se encuentran en el corazón de la llama
Who stand in the heart of the flame
Hail, Ο freedom flame!
que se encuentran en el corazón de la llama
¡salve, oh llama de la libertad!
Beloved Zadkiel, beloved Amethyst
Come with the sign of the cross of Saint Francis
And of Saint Germain
Amado Zadkiel, amada Amatista,
venid con la señal de la cruz de san Francisco
y de Saint Germain
Ye of the seventh ray
Ye of the violet flame
Ye of the freedom flame!
¡Vosotros, los del séptimo rayo
vosotros, los de la llama violeta,
vosotros, los de la llama de la libertad!
© The Summit Lighthouse
Espíritu divino, heraldo, precursor o mensajero enviado por Dios para comunicar Su Palabra a Sus hijos. Espíritu ministrante enviado para asistir a los herederos del Cristo, para confortar, proteger, guiar, fortalecer, enseñar, aconsejar y prevenir. Cohortes de la luz al servicio de los seres crísticos, los hijos e hijas de Dios, por todo el cosmos. Un “ángulo” de la conciencia de Dios –un aspecto de Su Autoconciencia; un ser formado por Dios a partir de Su propia llameante Presencia para asistir a la Vida en la forma. “Y de sus ángeles dijo: El que hizo a sus ángeles espíritus, y a sus ministros llama de fuego.” Las huestes celestiales comprenden una evolución que se diferencia de la humanidad por su llameante individualidad y la pureza de su devoción a la Deidad y a los arcángeles y jerarcas bajo cuyo mando prestan servicio. Su función es concentrar, acelerar y amplificar los atributos de Dios en beneficio de Su creación. Atienden las necesidades de los hombres atrayendo luz hacia su aura, intensificando los sentimientos de esperanza, fe y caridad, honor, integridad, valor, verdad y libertad, misericordia y justicia, y todo aspecto de la claridad cristalina de la Mente de Dios. Debido a la sacralidad de su presencia invisible, el autor del Libro de Hebreos dijo: “No olvidéis la hospitalidad, porque algunos, sin saberIo, hospedaron ángeles.” Con lo que abunda en el hecho de que los ángeles sí encarnan y andan entre nosotros como nuestros mejores amigos y auxiliadores, aun cuando sean unos perfectos extraños.
Metafóricamente hablando, los ángeles son electrones que giran alrededor de la Presencia Solar que es Dios, electrones que han elegido, por Su voluntad innata en ellos, expandir Su conciencia en todos los planos de la existencia; que han sido “cargados” de la luz/energía/conciencia del Gran Sol Central para ser “electrodos”, esto es, pilares de la ardiente presencia de Dios que operan como “transformadores de desaceleración” de la Luz inefable, para que Sus hijos puedan recibir una porción de esperanza de la gloria que ha de venir en medio de la noche oscura de su situación kármica en la tierra. Los ángeles pueden adquirir forma humana o de “bastoncillos” y “conos” o espirales y rollos de energía concentrada que puede ser liberada para la curación personal y planetaria, en respuesta al llamado de los seres crísticos, literalmente como una transfusión del Cuerpo y la Sangre del Cristo Cósmico dondequiera y cuandoquiera que se necesite. Hay ángeles de curación, de protección, amor, consuelo y compasión, ángeles que asisten en los ciclos de nacimiento y muerte, ángeles del Ojo Omnividente de Dios que esgrimen la espada llameante de la Verdad para separar de tajo lo real de lo irreal. Hay tipos y órdenes de ángeles que realizan servicios específicos en la jerarquía cósmica, como los serafines y los querubines, o los ángeles devas que sirven con los espíritus de la naturaleza y los elementales del fuego, el aire, el agua y la tierra. Véase ángeles caídos.
El reino de los cielos. El plano más elevado en la dimensión de la Materia; plano tan concreto y real (y más todavía) que el plano físico pero que se experimenta a través de los sentidos del alma en una dimensión y una conciencia más allá de la percepción física. El plano en que los registros akáshicos de la evolución completa de la humanidad se plasman individual y colectivamente. Es el mundo de los maestros ascendidos y sus retiros, ciudades etéricas de luz donde las almas de un orden mayor de evolución moran entre una encarnación y otra. Es el plano de la realidad libre de la sociedad sórdida, pecaminosa y enferma que los hombres y los demonios han conformado en los planos terrenales. Aquí la era de oro está en curso. El Amor es la plenitud de la Presencia de Dios por doquier, y los ángeles y los elementales, junto con los niños de Dios, sirven en armonía para manifestar el reino del Cristo en la Era Universal, por los siglos de los siglos. Como tal, es el plano de transición entre los reinos terrenal/celestial y el reino de Dios, el Espíritu, o Absoluto.
El plano etérico inferior se traslapa con los cinturones astral, mental y físico. Está contaminado por estos mundos inferiores ocupados por la falsa jerarquía y la conciencia de masas que ésta controla, incluidas sus matrices y emociones (inglés: e-motions = energies in motion, “energías en movimiento”).
[Los maestros ascendidos utilizan continuamente la palabra momentum en sus enseñanzas, con el significado original del término, que en inglés es “la fuerza del movimiento [motion] adquirida por un objeto en movimiento [moving] como resultado de la prolongación de [dicho] movimiento [motion]” (traducido de Webster Third International Dictionary).
La palabra momentum en latín significa “movimiento” y fue usada por el físico y matemático Isaac Newton (1643-1727) para describir un cuerpo en movimiento. El latín era la lengua de uso en las universidades europeas a la sazón. Hoy este concepto se llama “movimiento lineal” o “momento lineal”. Se representa por una p y su fórmula es p = m * v, donde m = masa, v = velocidad. Cuando damos un impulso a un objeto, éste empieza a moverse. La Primera Ley del Movimiento de Newton dice que si se retira el impulso el objeto sigue moviéndose a una velocidad constante. Para parar el objeto hay que aplicar una fuerza. Mientras más pesado el objeto (más masa), más fuerza se requiere para detenerlo. Asimismo, mientras más rápido va el objeto (más velocidad), más difícil resulta detenerlo.
La palabra momentum es una deformación de movimentum, formada por el verbo movere (“mover”) y el sufijo -entum, equivalente a -ento en español, que en este caso indica estado físico.
Podría traducirse por “momento”, pero para evitar confusión con el significado más común de este término (un instante de tiempo) hemos dejado siempre “moméntum” en nuestras traducciones. Es el equivalente de lo que algunos traducen por "impulso acumulado".]
Al estudiar estos reinos de la jerarquía también aprendemos algo acerca de cómo aplicamos la llama que está en nuestro corazón. Aprendemos, entonces, que es la energía del rayo azul, el impulso [thrust] del poder, la que da ímpetu [impetus] a la idea contenida en la mente de Dios. Sin ese impulso de energía, la idea carece de moméntum [momentum]. Es como la flecha lanzada desde el arco. Es la energía para estirar la cuerda hacia atrás la que da moméntum a la flecha que es la idea de Dios dirigiéndose a la manifestación.
[alchemy (del inglés medio alkamie, del francés medio alquemie, del latín medieval alchymia o alchimia, del árabe al-kimiya', "la piedra filosofal", de al, "el", + kimiya', del griego tardío chemeia, probable modificación de chymeia, probablemente del griego chyma, "fluido", de chein, "verter".) 1. Ciencia química y filosofía especulativa medievales cuyo fin era alcanzar la transmutación de los metales básicos en oro, el descubrimiento de una cura universal para la enfermedad, el descubrimiento de un medio de prolongar indefinidamente la vida y el gran poder, o mágico poder, de la transmutación; 2. el poder o el proceso de transformar algo común en algo especial; 3. transmutación inexplicable o misteriosa; 4a. arcaico: aleación de color dorado; 4b. obsoleto: trompeta de color dorado. (Webster's Third New International Dictionary, edición de 1971)]
Hay cinco chakras menores correspondientes a los cinco rayos secretos y un total de 144 centros de luz en el cuerpo del hombre. Véase Tabla de los chakras , El aura humana II, de Djwal Kul.
La luz espiritual es la energía de Dios; el potencial del Cristo. Como personificación del Espíritu, el término “Luz” puede utilizarse como sinónimo de los términos “Dios” y “Cristo”. Como esencia del Espíritu es sinónimo de “fuego sagrado”. Es la emanación del Gran Sol Central y de la Presencia YO SOY individualizada, y la Fuente de toda vida. Es lo que enciende la chispa divina, porque la Luz verdadera alumbra a toda manifestación de Dios que debe descender a un mundo oscurecido. El portador de Luz es el que desplaza la Oscuridad, y la Luz de su Presencia YO SOY proviene de los reinos del Día Eterno.
Juan 1:7-9
El cuerpo de la Primera Causa; siete esferas concéntricas de luz y conciencia que se interpenetran y que rodean a la Presencia YO SOY en los planos más altos del Espíritu, cuyo moméntum, incrementado por las palabras y las obras buenas del SEÑOR manifestadas por el alma en todas sus vidas pasadas, es accesible hoy en todo momento, según lo necesitemos. Nuestros recursos espirituales y nuestra creatividad —talentos, gracias, dones y genio, almacenados debido a un servicio ejemplar en los siete rayos— pueden ser atraídos desde el cuerpo causal con invocaciones a la Presencia YO SOY en el nombre del Ser Crístico. Además de ser el lugar donde nos “hacemos tesoros en el cielo” —el almacén de toda cosa buena y perfecta que forma parte de nuestra verdadera identidad—, las grandes esferas del cuerpo causal son el lugar de morada de Dios el Altísimo al que Jesús se refirió cuando dijo: “En la casa de mi Padre muchas moradas hay… voy, pues, a preparar lugar para vosotros… Vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo: para que donde yo estoy [ahí donde YO, el Cristo encarnado, SOY en la Presencia YO SOY] vosotros también estéis.” El cuerpo causal es la mansión, o morada, del Espíritu del YO SOY EL QUE YO SOY al cual el alma retorna a través de Cristo Jesús y el Ser Crístico individual en el ritual de la ascensión. Pablo se refería al cuerpo causal como la estrella de la individualización de la Llama de Dios de todo hombre cuando dijo: “porque una estrella es diferente de otra en gloria”. Véase Gráfica de tu Ser Divino.
Mateo 6:19-21; Juan 14:2; 3:1; 1 Corintios 15:41
Muchos de los retiros de los maestros, incluyendo sus escuelas de misterios, estuvieron en el plano físico durante las primeras eras de oro de la tierra e incluso después de la Gran Rebelión y la Caída de los ángeles caídos. Ante la destrucción y la profanación de sus templos, los maestros retiraron sus centros y sus llamas al plano etérico, de ahí el término “retiro”. Después de la ascensión del mensajero Mark L. Prophet el 26 de febrero de 1973, los Señores del Karma dieron otra oportunidad a los hijos de Dios de saldar su karma asistiendo a las clases en los retiros de los siete chohanes, el Maha Chohán y los Instructores del Mundo. El primero de enero de 1986, Gautama Buda y los Señores del Karma respondieron a la petición de los Señores de los Siete Rayos de abrir las universidades del Espíritu que se encuentran en sus retiros etéricos a decenas de miles de estudiantes para proseguir sistemáticamente el camino de la automaestría en los siete rayos. Los estudiantes viajan en su cuerpo sutil durante el sueño y pasan catorce días en el retiro de cada uno de los chohanes y del Maha Chohán. Véase Tabla de los ocho rayos.
Sacerdote del Altísimo, es un antiguo miembro del sacerdocio del fuego sagrado conocido como la Orden de Melquisedec, originada en otros sistemas estelares y de mucha antigüedad. Es el sacerdocio del séptimo rayo, que combina la religión perfecta con la ciencia perfecta. Aparece por primera vez en la Biblia como el sacerdote del Altísimo que bendijo a Abraham cuando éste regresaba de la matanza de los reyes, y quien le dio la décima parte del botín. Melquisedec le sirvió pan y vino, la primera constancia que tenemos en que se sirve la Sagrada Comunión. Fue el iniciado y el adepto más grande del Antiguo Testamento y ascendió al final de esa encarnación.
(sánscrito: “acto, acción, obra”). El karma es energía/conciencia en acción; la ley de causa y efecto y retribución. Llamada también ley del círculo, que decreta que cualquier cosa que hagamos completará un círculo y regresará a nuestra puerta para resolución. Pablo dijo: “Todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.” Newton observó: “Para toda acción hay una reacción igual y opuesta.” La ley del karma requiere que el alma reencarne hasta que todos los ciclos kármicos se hayan saldado. Así, de una vida a la siguiente el hombre determina su destino por sus acciones, incluyendo sus pensamientos, sentimientos, palabras y obras. Saint Germain enseña el sendero acelerado de la transmutación del karma con la llama violeta del Espíritu Santo y trascendiendo las rondas de renacimiento a través del sendero de la cristeidad individual que conduce a la ascensión demostrada por Jesús.
Gálatas 6:7
La libertad de crear; la opción de elegir el camino de la derecha o el camino de la izquierda, la Vida o la Muerte, las espirales de conciencia positivas o las negativas. Como el alma posee el don del libre albedrío, puede elegir permanecer en el plano de la relatividad, donde el bien y el mal son relativos según la propia perspectiva en el tiempo y el espacio; o bien puede elegir el plano del Absoluto, donde el Bien es real y el Mal es irreal y el alma contempla “cara a cara” a Dios como la Verdad viva. Libre albedrío o libre arbitrio significa que el individuo puede aceptar o rechazar el plan divino, las leyes de Dios y la oportunidad de vivir en la conciencia del Amor.
El don del libre albedrío otorgado por Dios conlleva una cierta extensión de conciencia, conocida como extensión de la vida (una serie de encarnaciones) y “los términos de la habitación del hombre”. El alma, por tanto, no solo está confinada al tiempo y el espacio durante su periodo de experimentación con el libre albedrío, sino que también está limitada a un cierto número de ciclos de vida. Al termino de esta oportunidad (compartimentada en días, años y dimensiones), el uso que haya hecho el alma del don del libre albedrío determina su destino. El alma que ha escogido glorificar al Ego Divino (la Realidad) asciende a la Presencia del YO SOY EL QUE YO SOY. El alma que ha elegido glorificar al ego humano (la irrealidad) pasa por la segunda muerte, esto es, su conciencia de negación del Ego será cancelada para siempre; y todas sus energías, que se pasan simultáneamente por el fuego sagrado, se regresan al Gran Sol Central para que ser repolarizadas.Apocalipsis 20:6, 14; 21:8
La polaridad masculina de la Divinidad; la coordenada de la Materia; Dios como Padre, que necesariamente incluye dentro de Su propia polaridad a Dios como Madre, de ahí que se le conozca como Dios Padre-Madre. El plano de la Presencia YO SOY, de la perfección; el lugar de morada de los maestros ascendidos en el reino de Dios.
En minúsculas, como en “espíritus”, es sinónimo de desencarnados o entidades astrales; “espíritu”, en singular y con minúsculas, y alma se usan indistintamente.Señor Maitreya maestro ascendido. Junto con Gautama, Maitreya prosiguió las disciplinas búdicas bajo la dirección de Sanat Kumara. Ocupa el cargo de Cristo Cósmico y Buda Planetario y sirve en la jerarquía bajo el Señor Gautama, dirigiendo la función de los Instructores del Mundo. Para la humanidad en evolución demuestra la conciencia cósmica del Cristo en todas las áreas del quehacer humano y en su universalidad a través del cosmos. Se le conoce como el Gran Iniciador y de hecho fue el iniciador de Jesús en su individualización de la Llama del Cristo en su encarnación final como salvador del mundo y ejemplo del Camino, la Verdad y la Vida para los aspirantes que recorren el sendero de la cristeidad personal. El amado Maitreya fue el SENOR Dios en el Edén, el guru de las llamas gemelas. El tan esperado “Buda Venidero” ha venido en verdad para reabrir su escuela de misterios y para asistir a Saint Germain y Porcia, llamas gemelas del séptimo rayo y jerarcas de la era de Acuario, en la introducción de la nueva era. El 31 de mayo de 1984, dedicó el Corazón del Retiro Interno y el Royal Teton Ranch al sendero y a la enseñanza del Cristo Cósmico para que los que se apartaron de su tutela siguiendo el camino de las Serpientes (los ángeles caídos que llevaron a Eva por el mal camino) pudieran regresar y que los hijos de la Luz siguieran al Hijo de Dios en la regeneración. Como patrocinador de las llamas gemelas, es el amigo de todos los iniciados del fuego sagrado. Cuando se le invoca, otorga la iluminación del Cristo y la fuerza de la Palabra para pasar las iniciaciones que tienen lugar bajo su patrocinio. Véase escuelas de misterios, buda.
La Palabra del SEÑOR Dios que fue pronunciada en los fíat originales de la creación. La emisión de las energías de la Palabra, o Logos, a través del chakra de la garganta por los Hijos de Dios en confirmación de la Palabra perdida. Está escrito: “Por tus palabras serás justificado y por tus palabras serás condenado” (Mateo 12:37). Cuando el hombre y la mujer reconsagran el chakra de la garganta afirmando la Palabra de Dios, se convierten en instrumentos de los mandamientos de Dios que cumplen la ley de su re-creación a imagen del Hijo.
Las invocaciones que ofrecían los sacerdotes y sacerdotisas del fuego sagrado en Lemuria con el poder de la Palabra hablada se daban originalmente siguiendo la ciencia del Logos. La perversión de esta ciencia en la práctica de la magia negra ocurrió más tarde, en los últimos días de Lemuria, provocando la destrucción de los templos de la Virgen Cósmica y el terremoto por el que se hundió el continente. Las estatuas de la isla de Pascua son los vestigios del sitio donde las guerras de los dioses hicieron estremecer a la tierra en aquellos días terribles. En contraste, esta ciencia de la Palabra hablada fue utilizada en su forma pura por los israelitas para derribar las murallas de Jericó. Hoy los discípulos utilizan el poder de la Palabra en decretos, afirmaciones, plegarias y mantras para atraer la esencia del fuego sagrado desde la Presencia YO SOY, el Ser Crístico y los seres cósmicos que encauzan la luz de Dios hacia matrices transmutadoras y transformadoras para obrar cambios constructivos en los planos de la Materia.
La ciencia de la Palabra hablada (junto con la ciencia del concepto inmaculado) es el ingrediente clave y esencial en toda alquimia. Sin la Palabra hablada no hay alquimia, no hay creación, no hay cambio ni intercambio en ninguna parte de la Vida. Es la piedra blanca del alquimista, que cuando se aplica con éxito con los secretos de la llama del corazón revela el “nuevo nombre escrito, el cual ninguno conoce sino aquel que lo recibe”. Bienaventurado el que triunfa sobre la oposición que la mente carnal interpone al ejercicio —la práctica que hace al maestro—de la ciencia de la Palabra hablada en el ofrecimiento de decretos dinámicos diarios al SEÑOR, pues a éste dará el Espíritu Santo “a comer del maná escondido”.
El maestro de la era de Acuario, Saint Germain, enseña a sus discípulos a invocar, por el poder de la Palabra hablada, la llama violeta para el perdón de los pecados y para el bautismo del fuego sagrado en preparación para la transición hacia una Conciencia Divina más elevada.