Jesús de Nazaret era y es el Cristo vivo porque fue la plena encarnación de la . En él la de poder, sabiduría y amor, la Trinidad de Padre, Hijo y , era Dios, un fuego sagrado consumidor, tres personas en una, una luz para alumbrar a todos los pueblos.
En el hombre y la mujer medios la llama trina tiene una altura de un dieciseisavo de pulgada (1.5 mm), habiendo sido reducida por el edicto del SEÑOR Dios pronunciado en la época de Noé. Jesucristo, guía en el camino, nos enseña a expandir la llama trina en la para que podamos seguir su ejemplo y convertirnos en la encarnación viva de la Palabra. Nos enseña a equilibrar las energías del amor, la sabiduría y el poder hasta que esta acción trina del fuego sagrado nos envuelva y nos convirtamos en testigos vivos del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Convertirnos en la llama de Dios es la meta de la vida. Jesús, el Salvador de la humanidad, está aquí hoy para enseñarnos el camino, para enseñarnos que el es el camino, la verdad y la vida.
Jesús vino a la tierra por primera vez como voluntario con , y ha tenido muchas encarnaciones aquí desde entonces.
♦ En una de ellas reinó como emperador y sumo sacerdote en una civilización de en la que duró dos mil años, de 34,550 a 32,550 a.C. Esta era tuvo lugar diecisiete eras antes que la nuestra y se encontraba bajo el signo de Cáncer. Jesús nació en 33,050 a.C. y comenzó su reinado en 33,000 a.C., cuando la era de oro ya tenía más de 1,500 años. Su consorte era su , a quien conocemos como la maestra ascendida Magda. Gobernaban porque eran los más altos representantes de Dios encarnados en esa civilización, donde todo el mundo conocía y aceptaba la voluntad de Dios. Jesús y Magda no tenían que imponer ninguna regla sobre el pueblo porque todos estaban sintonizados con su Fuente Divina.
Sin embargo, después de que Jesús reinara durante 450 años, un individuo llamado Xenos, principal consejero del emperador, plantó las semillas de la corrupción. Finalmente Xenos convenció al pueblo para que se revelara contra el gobierno (personificado en Jesús) porque supuestamente no los apoyaba. Xenos asumió el liderazgo del gobierno y Jesucristo, y dos millones de súbditos leales (el 20 por ciento del pueblo) marcharon a la tierra que después sería Suern: la India y Arabia. La mitad de ellos ascendió en aquel tiempo; la otra mitad ha seguido evolucionando en la tierra hasta el día de hoy.
En la Atlántida, la que un día fue una civilización de era de oro cayó gradualmente en la barbarie porque sus habitantes, sin que lo percibieran, se volvieron cada vez más densos e insensibles hacia la vida. El pillaje y la anarquía prevalecieron hasta el punto en que Xenos mismo perdió el control. Con el tiempo las ciudades desaparecieron y se derrumbaron. La barbarie reinó en la Atlántida de 30,000 a 16,000 a.C., cuando surgió la gran civilización de Poseid.
♦ Después de esa encarnación Jesús se materializó en la Atlántida y en otras partes del planeta, ahí donde y cuando se le necesitaba, si el de las personas y la lealtad a la Divinidad justificaban su intercesión. Hacia 15,000 a.C., Jesús regresó como el dirigente, el Rai de la Atlántida. Tal como Phylos El Tibetano lo describe en su libro Un habitante de dos planetas, este gran rai apareció en el templo de la capital, Caiful, y provocó que brotara allí el Maxin, el Fuego de Incal. Esta llama no alimentada ardió en el altar del templo durante cinco mil años. El rai de la luz Maxin gobernó durante 434 días. Revisó las leyes y dio un código legal que gobernó la Atlántida durante miles de años después.
Tras una larga era de oro, la civilización de la Atlántida fue corrompida por falsos sacerdotes, hasta que “vio Dios que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal”. [Génesis 6:5] La Atlántida se hundió en el gran cataclismo registrado como el diluvio de Noé.
♦ En la descripción que hace el Génesis de Adán y Eva encontramos a Jesús como Abel, el hijo de Adán, quien encontró el favor del SEÑOR pero murió a manos de Caín, su celoso hermano. Cuando Eva concibió y dio a luz a otro hijo, lo llamó Set: “Porque Dios, dijo ella, me ha sustituido otro hijo en lugar de Abel, a quien mató Caín”. [Génesis 4:25] Y cuando le nació a este Set un hijo, Enós, está escrito: “Entonces los hombres comenzaron a invocar el nombre del SEÑOR.” [Génesis 4:26] Así, a través del renacimiento y la renovación de la semilla espiritual de Cristo en Set — Abel reencarnado—, los hijos y las hijas de Dios volvieron a tener acceso a la poderosa por su mediación.
♦ Jesús volvió como José, el hijo de Jacob, vendido como esclavo en Egipto por sus hermanos, los mismos que después encarnaron como sus discípulos. En Egipto recibió altos honores y autoridad en los asuntos de estado debido a su interpretación espiritual de los sueños del faraón.
♦ Como Josué, hijo de Nun, Jesús derribó las murallas de Jericó y condujo a los israelitas a la Tierra Prometida.
♦ Como David, escribió los Salmos: “Porque no dejarás mi alma en el infierno, ni permitirás que tu santo vea corrupción.” [Salmo 16:10]
♦ Como Eliseo, fue el pupilo de Elías, que ascendió y después, por dispensación especial, reencarnó como Juan el Bautista para preparar el camino para la misión de Jesús en Galilea.
♦ Jesús tuvo su última encarnación habiendo pasado muchas iniciaciones a lo largo de sus encarnaciones en Oriente y Occidente; sin embargo, retuvo el pequeño porcentaje de necesario para su misión, karma que ya había saldado cuando abandonó Palestina a la edad de treinta y tres años. Jesús reconoció en Juan el Bautista a su guru Elías, que había “venido otra vez” para preparar el camino de su . [Marcos 9:13]
Entre los veinte y los treinta años de edad Jesús estudió tanto en s internos como en retiros externos de la en Luxor y en la cordillera del Himalaya. En un monasterio de un valle de Ladakh, en Cachemira, aún se conservan rollos que describen el viaje de Jesús [descrito en Los años perdidos de Jesús, de ]. En la India estudió con el , el y el . Fue ahí donde recibió los s clave para su misión, que más tarde enseñaría a sus discípulos. Algunos de esos mantras se incluyen en las “Afirmaciones transfiguradoras”, dictadas por el maestro Jesús a .
Afirmaciones Transfiguradoras de Jesucristo
TRANSFIGURING AFFIRMATIONS I AM THAT I AM |
AFIRMACIONES TRANSFIGURADORAS YO SOY EL QUE YO SOY |
Habiendo sido miembro de la Orden de antes de su última encarnación, Jesús había aprendido la ciencia de la invocación y la . Este conocimiento lo capacitó para transformar el agua en vino, para calmar el mar, curar a los enfermos y resucitar a los muertos.
Después de su crucifixión y resurrección, Jesús se trasladó a Cachemira, donde vivió hasta los ochenta y un años. Al final de esa vida ascendió desde el retiro etérico de .
Después de ascender, Jesús fue nombrado del sexto . Cuando Sanat Kumara regresó a Venus el 1 de enero de 1956, Jesús asumió el puesto de , sustituyendo al Señor Maitreya, quien se convirtió en planetario.
Jesús nos llama al sendero del discipulado bajo los . Ha entregado una serie de llamados a este sendero, publicados en el libro Walking with the Master: Answering the call of Jesus (De la mano del Maestro: lecciones para seguir el llamado de Jesús). A los que desean ser sus discípulos en la Jesús les dice:
Mayor amor que éste no tiene ningún hombre: que un hombre dé su vida por sus amigos. Benditos míos, esto no significa hablar de la muerte sino de una vida vibrante vivida —vivida en verdad para transmitir el fuego de mi corazón a todos. Esto es lo que significa ser un discípulo que reciba el nombre de apóstol, instrumento y mensajero de , transmisor de esa luz.”
Jesús presta servicio en el Retiro de Arabia y, con la , en el Templo de la Resurrección situado sobre Tierra Santa. La radiación del se puede atraer tocando su , “Joy to the World”.
JOY TO THE WORLD
Joy to the world! the Lord is come
Let earth receive her King
Let ev'ry heart prepare him room
And heav'n and nature sing
And heav'n and nature sing
And heav'n, and heav'n and nature sing.
Joy to the world! the Saviour reigns
Let men their songs employ
While fields and floods, rocks, hills, and plains
Repeat the sounding joy
Repeat the sounding joy
Repeat, repeat the sounding joy.
He rules the world with truth and grace
And makes the nations prove
The glories of his righteousness
And wonders of his love
And wonders of his love
And wonders, and wonders of his love.
ALÉGRESE EL MUNDO
¡Alégrese el mundo! El Señor ha venido
Que la tierra reciba a su Rey
Que todo corazón le dé cabida
Y el cielo y la naturaleza canten
Y el cielo y la naturaleza canten
Y el cielo, y el cielo y la naturaleza canten.
¡Alégrese el mundo! El Salvador reina
Que los hombres apliquen sus cantos
Mientras campos y torrentes, rocas, cuestas y llanuras
Repiten el sonoro júbilo
Repiten el sonoro júbilo
Repiten, repiten el sonoro júbilo.
Él gobierna el mundo con verdad y gracia
Y hace que las naciones demuestren
Las glorias de su justicia
Y las maravillas de su amor
Y las maravillas de su amor
Y las maravillas, y las maravillas de su amor
© Church Universal and Triumphant
La Palabra es el Logos, el poder de Dios y la realización de ese poder encarnado en y como el Cristo. Los devotos del Logos liberan las energías de la Palabra en el ritual de la ciencia de la Palabra hablada. Es a través de la Palabra como el Dios Padre-Madre se comunica con la humanidad. El Cristo es la personificación de la Palabra. Véase Cristo, decreto.
La llama del Cristo, la chispa de la vida que arde en la cámara secreta del corazón de los hijos e hijas de Dios. La sagrada trinidad de poder, sabiduría y amor que es la manifestación del fuego sagrado. Véase Gráfica de tu Ser Divino.
La Tercera Persona de la Trinidad; la omnipresencia de Dios; las lenguas hendidas de fuego que focalizan a Dios Padre-Madre, también llamado el fuego sagrado; las energías de Vida que animan a un cosmos. En la Trinidad hindú de Brahma, Vishnu y Shiva, el Espíritu Santo corresponde a Shiva, conocido como el Destructor-Liberador porque su amor que todo lo consume, cuando se invoca en los planos de la Materia, ata a las fuerzas del mal y transmuta la causa y el efecto de las creaciones erróneas de los hombres, liberándolos de la prisión de su karma y de los seres oscuros que la habitan. El prana es la esencia del Espíritu Santo que ingerimos con el aliento del fuego sagrado a través de los chakras para nutrir a los cuatro cuerpos inferiores. El Espíritu Santo es el foco del equilibrio del Dios Padre-Madre en el núcleo de fuego blanco del ser. El exorcismo de los espíritus malignos y de las entidades impuras se realiza mediante el fuego sagrado del Espíritu Santo, en el nombre del Cristo y del YO SOY EL QUE YO SOY. Los nueve dones del Espíritu Santo son poderes que se otorgan a los siervos del Señor para atar a la muerte y el infierno y realizar Sus obras en la tierra.
La Persona y la Llama del Espíritu Santo es el Consolador que Jesús prometió que vendría cuando nuestro Señor nos dejara –a iluminarnos, a instruirnos y a hacernos recordar todas las cosas que el amado Jesús nos ha enseñado, tanto en la tierra como en el cielo. Cada vez que un hijo o hija de Dios asciende a la Presencia del YO SOY EL QUE YO SOY, el Espíritu Santo desciende para llenar el vacío y magnificar la Presencia del Señor en la tierra. Es éste el ritual del descenso del Espíritu Santo prometido por Jesús a sus discípulos cuando el Maestro dijo: “Permaneced en la ciudad de Jerusalén hasta que seáis dotados del poder de las alturas”, cosa que ocurrió en Pentecostés después del ascenso de Jesús al cielo.
El representante de la llama del Espíritu Santo para las evoluciones de la tierra es el maestro ascendido que ocupa el cargo de Maha Chohán . El Espíritu Santo es la Personalidad Impersonal de la Divinidad y está ubicada en el lado occidental de la Ciudad Cuadrangular. Véase Gráfica de tu Ser Divino.
1 Corintios 12:4-11; Juan 14:16, 26; 16:7; Lucas 24:49, 51; Marcos 16-19; Hechos 2:1-4
(sánscrito: ananda-kanda, “raíz de la beatitud”). Chakra del octavo rayo. El santuario de meditación detrás del chakra del corazón, el lugar al que se retira el alma de los portadores de luz. Es el núcleo de la vida donde el individuo se ve cara a cara con el Guru interno, el amado Santo Ser Crístico, y recibe las pruebas para el alma que preceden a la unión alquímica con ese Santo Ser Crístico: el matrimonio del alma con el Cordero.
Cámara espiritual situada detrás del chakra del corazón y rodeada por una gran luz y protección. Es el punto de conexión del cordón de luz que desciende desde la Presencia YO SOY para sostener el latido del corazón físico, dando vida, propósito e integración cósmica. Es el lugar especial donde se comulga con el Santo Ser Crístico y se aviva el fuego de la llama trina. Véase matrimonio alquímico, Tabla de los chakras , Decretos de Corazón, Cabeza y Mano .El nombre de Dios (Éxodo 3:14). Véase Presencia YO SOY.
Ciclo de iluminación, paz y armonía en el que las almas de la humanidad se fusionan en la Llama del Cristo para el cumplimiento del plan divino, “como Arriba, así abajo”. A través de la convergencia del plano etérico y la capa etérica con los tres vehículos inferiores del cuerpo planetario y sus evoluciones, el reino de los cielos se manifestará en la tierra tal como ya existe ahora en la octava etérica. Véase cuerpo etérico.
“Era de oro significa una era basada en el patrón oro –el patrón del oro de la conciencia crística, de la regla de oro, del oro como luz del sol precipitada para el equilibrio de la mente y de las emociones y para el flujo de la vida incluso en el plano físico” (Dios del Oro).
El continente isla que se encontraba donde ahora está el océano Atlántico y que se hundió en el cataclismo conocido como el Diluvio de Noé, hace aproximadamente 11,600 años, según cálculos de James Churchward. Platón la describió vívidamente; Edgar Cayce la “vio” y la describió en sus lecturas; Taylor Caldwell la rememora en algunos pasajes de La leyenda de la Atlántida; Otto Muck, fallecido científico alemán, la exploró científicamente y la autentificó, estableciendo la hora y la fecha de su destrucción (por un asteroide que se impactó en el Triángulo de las Bermudas con una fuerza equivalente a treinta mil bombas de hidrógeno), ¡a las 8 pm del 5 de junio de 8498 a.C.! En sus diálogos Platón cuenta que en “la isla de la Atlántida había un gran y maravilloso imperio” que regía África hasta Egipto, Europa hasta Italia y “partes del continente” (se piensa que es una referencia a América, específicamente a América Central, Perú y el valle del Mississippi). Se ha postulado que la Atlántida y las pequeñas islas que la bordeaban al este y al oeste formaban un puente de tierra continuo que iba de América a Europa y África.
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(sánscrito: “acto, acción, obra”). El karma es energía/conciencia en acción; la ley de causa y efecto y retribución. Llamada también ley del círculo, que decreta que cualquier cosa que hagamos completará un círculo y regresará a nuestra puerta para resolución. Pablo dijo: “Todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.” Newton observó: “Para toda acción hay una reacción igual y opuesta.” La ley del karma requiere que el alma reencarne hasta que todos los ciclos kármicos se hayan saldado. Así, de una vida a la siguiente el hombre determina su destino por sus acciones, incluyendo sus pensamientos, sentimientos, palabras y obras. Saint Germain enseña el sendero acelerado de la transmutación del karma con la llama violeta del Espíritu Santo y trascendiendo las rondas de renacimiento a través del sendero de la cristeidad individual que conduce a la ascensión demostrada por Jesús.
Gálatas 6:7
Muchos de los retiros de los maestros, incluyendo sus escuelas de misterios, estuvieron en el plano físico durante las primeras eras de oro de la tierra e incluso después de la Gran Rebelión y la Caída de los ángeles caídos. Ante la destrucción y la profanación de sus templos, los maestros retiraron sus centros y sus llamas al plano etérico, de ahí el término “retiro”. Después de la ascensión del mensajero Mark L. Prophet el 26 de febrero de 1973, los Señores del Karma dieron otra oportunidad a los hijos de Dios de saldar su karma asistiendo a las clases en los retiros de los siete chohanes, el Maha Chohán y los Instructores del Mundo. El primero de enero de 1986, Gautama Buda y los Señores del Karma respondieron a la petición de los Señores de los Siete Rayos de abrir las universidades del Espíritu que se encuentran en sus retiros etéricos a decenas de miles de estudiantes para proseguir sistemáticamente el camino de la automaestría en los siete rayos. Los estudiantes viajan en su cuerpo sutil durante el sueño y pasan catorce días en el retiro de cada uno de los chohanes y del Maha Chohán. Véase Tabla de los ocho rayos.
"Guru Ma", la mensajera de la Gran Hermandad Blanca en activo de 1961 a 1999, que hizo su transición a los planos superiores en 2009. Infundida del fuego del Espíritu Santo y la era de Acuario, fue pionera del pensamiento religioso moderno, enseñando los senderos místicos de las principales religiones del mundo. Sus libros desafían al cristianismo dominante con preguntas audaces y respuestas aún más audaces.
Fórmula mística o invocación; palabra o combinación de palabras que se consideran sagradas, a menudo en sánscrito, que se recita o canta con el fin de intensificar la acción del Espíritu de Dios en el hombre; forma de oración que consiste en una palabra o grupo de palabras que se canta una y otra vez para atraer un aspecto particular de la Deidad o de un ser que materializa ese aspecto de la Deidad. Según la tradición hindú, los sabios que recibieron los mantras por inspiración divina eran capaces de escuchar los tonos fundamentales del universo. Véase decreto.
[Definición del hinduismo: “mantra significa ‘instrumento para pensar’, es una herramienta utilizada para transformar la mente. En la práctica, un mantra es un sonido, palabra o frase sagrados que se pueden recitar en voz alta, en voz baja o mentalmente. Aunque se expresa físicamente como sonido, la verdadera esencia de un mantra es la vibración insonora de la energía divina integrada en él. Un mantra trabaja con una mente enfocada y llevando la atención hacia el interior; progresivamente conducirá a niveles de conciencia más elevados y más sutiles.”]
[alchemy (del inglés medio alkamie, del francés medio alquemie, del latín medieval alchymia o alchimia, del árabe al-kimiya', "la piedra filosofal", de al, "el", + kimiya', del griego tardío chemeia, probable modificación de chymeia, probablemente del griego chyma, "fluido", de chein, "verter".) 1. Ciencia química y filosofía especulativa medievales cuyo fin era alcanzar la transmutación de los metales básicos en oro, el descubrimiento de una cura universal para la enfermedad, el descubrimiento de un medio de prolongar indefinidamente la vida y el gran poder, o mágico poder, de la transmutación; 2. el poder o el proceso de transformar algo común en algo especial; 3. transmutación inexplicable o misteriosa; 4a. arcaico: aleación de color dorado; 4b. obsoleto: trompeta de color dorado. (Webster's Third New International Dictionary, edición de 1971)]
La “Ciudad de Blanco” etérica, antiguo retiro de Sanat Kumara, originalmente fue una réplica física de la ciudad venusina de los Kumaras. Shamballa fue construida en una isla en el brillante mar azul del Gobi (ahora el desierto del Gobi) por voluntarios que precedieron a Sanat Kumara en su viaje a la tierra. Se llegaba a Shamballa desde el continente a través de un hermoso puente de mármol. El templo principal, donde Sanat Kumara estableció el foco de la llama trina miles de años atrás, se caracterizaba por un domo dorado y estaba rodeado de terrazas, fuentes llameantes y siete templos, uno para cada uno de los siete rayos. Cada año las personas venían de lejos para contemplar el fuego sagrado físico y visible y para llevarse consigo un trozo de madera consagrado por Sanat Kumara y con él encender sus hogueras durante todo el año. Así comenzó la tradición del tronco de yule, que conmemoraba el regreso al fuego de la cristeidad. El retiro físico de Shamballa fue trasladado a la octava etérica durante las eras oscuras subsecuentes.
El 31 de diciembre de 1976, Gautama Buda, jerarca de Shamballa y sucesor de Sanat Kumara, anunció que "América es el lugar a donde trasladaremos Shamballa”. Dijo: “Traeremos aquí algún día esa ciudad de luz. Será la implementación de un campo de fuerza secundario, el aspecto Omega de Shamballa, ya que el aspecto Alfa permanece donde está... en el Mar de luz del Gobi sobre el desierto del Gobi”. El Señor Gautama recientemente estableció su Shamballa occidental en la octava etérica sobre el Retiro Interno, cerca del Parque Nacional Yellowstone. El 18 de abril de 1981 anunció: “Desde Shamballa formo un arco de luz. Quisiera establecer el terreno para el Anciano de Días... En este momento contemplo —observen bien— la formación del arco de la llama de Shamballa hacia el Retiro Interno como la morada occidental de los budas y de los que han de convertirse en bodhisattvas que son devotos de la luz de la Madre.”
Cargo en la jerarquía que ocupan aquellos seres ascendidos cuyo grado de realización espiritual los califica para representar al Cristo Universal y personal para la humanidad no ascendida. El cargo de Instructor del Mundo que antes desempeñaba Maitreya fue transferido a Jesús y a su discípulo san Francisco (Kuthumi) el 1 de enero de 1956, cuando el manto del Señor del Mundo fue transferido de Sanat Kumara a Gautama Buda y el cargo de Cristo Cósmico y Buda Planetario (que antes desempeñaba Gautama) fue simultáneamente ocupado por el Señor Maitreya. En este ciclo de dos mil años, Jesús y Kuthumi, al servicio de Maitreya, son los responsables de la expansión de las enseñanzas que conducen a la automaestría individual y a la conciencia crística. Ellos patrocinan a todas las almas que buscan la unión con Dios; las instruyen en las leyes fundamentales que rigen las secuencias de causa/efecto de su propio karma y les enseñan cómo enfrentar los retos cotidianos de su dharma individual, el deber de cada cual de manifestar el potencial crístico mediante la labor sagrada.
Los Instructores del Mundo han patrocinado la educación de las almas en la luz del Cristo en todos los niveles, preescolar, primaria, secundaria y universidad. En todos los países del mundo han inspirado a maestros, filósofos, científicos, artistas, profesionistas y no profesionistas la sabiduría de las eras aplicada a cada cultura en particular, en la medida en que las culturas del mundo sirven para manifestar las múltiples facetas de la conciencia crística.
El término “instructor mundial”, escrito con minúscula, se refiere al discípulo encarnado que consagra la vocación de su vida a la iluminación del planeta bajo el Cristo Universal. Este apelativo describe la labor sagrada escogida por el discípulo y su dedicación a ella. No dice nada de su grado de realización espiritual ni indica que haya alcanzado las cualidades necesarias para compartir el cargo o manto de Jesús y Kuthumi.
(sánscrito: budh, “despertar”, “saber”, “percibir”). Significa “el iluminado”. Denota una función en la jerarquía espiritual de mundos que se alcanza al pasar ciertas iniciaciones del fuego sagrado, entre ellas las de los siete rayos del Espíritu Santo y las de los cinco rayos secretos, la de la elevación del rayo femenino (el fuego sagrado de la Kundalini) y la de la “maestría del siete en los siete multiplicado por diez”.
Gautama alcanzó la iluminación búdica hace 25 siglos, sendero que había proseguido durante múltiples encarnaciones anteriores y que culminó en su meditación de 49 días bajo el árbol bo; de ahí que se le llame Gautama el Buda. Ocupa el cargo de Señor del Mundo, sosteniendo, con su cuerpo causal y su llama trina, la chispa divina y la conciencia de las evoluciones de la tierra que se acercan al sendero de la cristeidad personal. Su aura de amor y sabiduría que cubre al planeta surge de su devoción incomparable a la Madre Divina. Es el jerarca de Shamballa, el retiro original de Sanat Kumara, que ahora está en el plano etérico sobre el desierto del Gobi. El 18 de abril de 1981, el amado Gautama Buda estableció su Shamballa Occidental en el Retiro Interno del Royal Teton Ranch, sobre las tierras vírgenes de América, en los confines septentrionales del parque nacional Yellowstone. Véase Señor del Mundo, Shamballa.
El Señor Maitreya, el Cristo Cósmico, también ha pasado las iniciaciones búdicas. Es el tan esperado Buda Venidero, que ha salido a la luz para enseñar a todos los que se han alejado del camino de Gran Guru Sanat Kumara, de cuyo linaje descienden tanto él como Gautama. En la historia del planeta han existido numerosos budas que han auxiliado a las evoluciones de la humanidad en los pasos y etapas del sendero del bodhisattva. En Oriente se conoce a Jesús como el buda Issa, el Salvador del Mundo por amor y sabiduría de la Divinidad. Véase bodhisattva, Señor Maitreya.
En los años sesenta, nueve corrientes de vida no ascendidas que habían pasado las iniciaciones búdicas se ofrecieron a encarnar para asistir a las evoluciones de la Tierra durante su difícil y peligrosa transición a la era de Acuario. Su servicio mundial será reconocido cuando hayan alcanzado la edad del ejemplo búdico y crístico, de los 33 a los 36 años. El 1 de enero de 1983 Gautama Buda anunció que nueve budas que habían permanecido en el nirvana durante novecientos años estaban descendiendo por el haz de luz para entrar en el corazón de nueve individuos en este planeta y, a través de su presencia electrónica, en el campo de fuerza de miles de corazones dedicados. Gautama también otorgó la dispensación de que a partir de ese momento toda oración, mantra o cántico de los devotos del Cristo y del Buda se multiplicaría por el poder del corazón de Gautama y de los nueve budas.
A fines de 1966 la Diosa de la Pureza dijo que “de la gran llama de pureza cósmica, hace dos años nacieron en la tierra nueve niños, budas del corazón del Padre… La intención era que por el poder del tres veces tres estos niños santos traerían a la humanidad la gran conciencia de la pureza divina que sostiene nuestro amado Señor Gautama. Hoy vengo a vosotros con un mensaje que debería hacer despertar vuestro corazón a la necesidad de más decretos. Desde el nacimiento de estos niños santos uno de ellos salió la pantalla de la vida porque su entorno era tan impuro y carente de la llama de la pureza que no era apropiado para que surgiera la luz de ese corazón, que murió como una flor cortada de su tallo. Y, así, ocho de estos niños santos permanecen en el cuerpo planetario.” El noveno buda volvió a nacer subsecuentemente en Madrás, India.
Filipenses 2:5
La luz espiritual es la energía de Dios; el potencial del Cristo. Como personificación del Espíritu, el término “Luz” puede utilizarse como sinónimo de los términos “Dios” y “Cristo”. Como esencia del Espíritu es sinónimo de “fuego sagrado”. Es la emanación del Gran Sol Central y de la Presencia YO SOY individualizada, y la Fuente de toda vida. Es lo que enciende la chispa divina, porque la Luz verdadera alumbra a toda manifestación de Dios que debe descender a un mundo oscurecido. El portador de Luz es el que desplaza la Oscuridad, y la Luz de su Presencia YO SOY proviene de los reinos del Día Eterno.
Juan 1:7-9
Arcangelina del quinto rayo, complemento divino del arcángel Rafael, Reina de los Ángeles y la bendita madre de Jesús. Su nombre significa Rayo de la Madre (inglés: Mother Ray, Ma Ray). Llamada por el Padre para encarnar en la tierra y dar nacimiento al Cristo que habría de salvar a aquellas almas que habían sido descarriadas por los rebeldes luciferinos, María es uno de los miembros de las huestes del SEÑOR que a lo largo de sus encarnaciones en la tierra ha ejemplificado ardientemente la Maternidad de Dios… Al concluir su vida de santidad como la Madre de Jesús, y habiendo cumplido su plan divino, María ascendió al corazón del Padre. Hoy presta servicio a la humanidad en la “Iglesia viviente” en niveles internos, muy cerca de las jerarquías de ángeles y maestros ascendidos que conforman la Gran Hermandad Blanca. La intercesión de la Madre María es inmediata cuando se da su Rosario de la Nueva Era, que dictó a la Mensajera Elizabeth Clare Prophet en 1972. Véase María, la madre de Jesús.
(griego: Christos, “ungido”). Mesías (hebreo y arameo: “ungido”); “el Ungido”, aquel que es investido e infundido o ungido de la luz (el Hijo) de Dios. La Palabra, el Logos, la Segunda Persona de la Trinidad: “Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad… Aquél era la luz verdadera, que alumbra a todo hombre que viene al mundo. En el mundo estaba, y el mundo fue hecho por él y el mundo no le conoció.” En la Trinidad hindú de Brahma, Vishnu y Shiva, el término “Cristo” corresponde a la encarnación de Vishnu, el Preservador; avatara, hombre Dios, el que despeja la oscuridad, guru.
El Cristo Universal es el mediador entre los planos del Espíritu y los planos de la Materia; personificado como el Santo Ser Crístico, es el mediador entre el Espíritu de Dios y el alma del hombre. El Cristo Universal sostiene el nexo (el flujo en forma de ocho) de la conciencia a través del cual las energías del Padre (Espíritu) pasan a sus hijos para la cristalización (inglés: Christ-realization: realización crística) de la Llama de Dios por el esfuerzo de su alma en el vientre cósmico (la matriz) de la Madre (Materia). A este proceso se le llama materialización (inglés: Mater-realization: realización en la Materia), “El Descenso”. El proceso por el cual las energías de la Madre aglutinadas en el alma pasan a través del nexo de la conciencia crística hacia el Padre es la aceleración llamada espiritualización (inglés: Spirit-realization: realización en el Espíritu), “El Ascenso”. Otro nombre que se le da al proceso mediante el cual la energía del alma regresa de la Materia al Espíritu es sublimación (inglés: sublimation: sublime action: acción sublime) o transmutación. Siendo ya una con el Hijo, el alma experimenta la consumación de este proceso como la ascensión, la unión con el Espíritu de la Presencia YO SOY, el Padre. La ascensión es el cumplimiento en el cielo de la promesa de Jesús en la tierra: “En aquel día vosotros conoceréis que yo estoy en mi Padre, y vosotros en mí, y yo en vosotros… El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos con él morada.”
La fusión de las energías de la polaridad positiva y negativa de la Divinidad en la creación ocurre a través del Cristo Universal, el Logos sin el cual “nada de lo que es fue hecho”. El flujo de luz del macrocosmos hacia el microcosmos, del Espíritu (la Presencia YO SOY) al alma y de regreso siguiendo la espiral en forma de ocho, se cumple a través de este bendito Mediador que es Cristo, el SEÑOR, la verdadera encarnación del YO SOY EL QUE YO SOY. Ya que Jesús es esa Palabra encarnada, puede decir: “El YO SOY es [el YO SOY en mí es] la Puerta Abierta [al cielo y a la tierra] que ningún hombre puede cerrar”, y “Todo el Poder me es dado [a través del YO SOY en mí] en el cielo y en la tierra”, y también “He aquí, YO SOY [el YO SOY en mí está] vivo por siempre –como Arriba, así abajo– y tiene las llaves del reino de los cielos y las llaves de la muerte y el infierno, y a quienquiera que el Padre quiera yo se las doy, y son dadas en su nombre”. Esto que aún hoy afirma el maestro ascendido Jesucristo también lo afirma para nosotros nuestro Santo Ser Crístico. Así, el Cristo Universal del Hijo único y de los muchos efectivamente mediatiza la Presencia del YO SOY hacia nosotros a través de nuestro propio y amado Santo Ser Crístico. Ésta es la verdadera comunión con el Cristo Cósmico cuyo Cuerpo (Conciencia) fue “partido”, compartido, individualizado para cada hijo del corazón del Padre. Los Hijos de Dios son depositarios de la Máxima Luz para los que aún son criaturitas en Cristo.
El término “Cristo” o “ungido del Cristo” también denota un cargo en la jerarquía que ocupan los que han alcanzado la automaestría en los siete rayos y los siete chakras del Espíritu Santo. La maestría crística incluye equilibrar la llama trina (los atributos divinos de poder, sabiduría y amor) para la armonización de la conciencia y la implementación de la maestría de los siete rayos en los chakras y en los cuatro cuerpos inferiores mediante la Llama de la Madre (la kundalini elevada). En la hora designada para la ascensión, el alma así ungida eleva la espiral de la llama trina desde abajo de los pies, pasando por toda la forma, para la transmutación de todo átomo y célula de su ser, conciencia y mundo. La saturación y la aceleración de los cuatro cuerpos inferiores y el alma mediante esta luz transfiguradora de la llama crística ocurre en parte durante la iniciación de la transfiguración, se incrementa con la resurrección y adquiere plena intensidad durante el ritual de la ascensión.
El Ser Crístico individual, el Cristo personal, es el iniciador de toda alma viviente. Cuando el individuo pasa estas diversas iniciaciones en el sendero de la cristeidad, incluyendo “dar muerte al morador del umbral”, se gana el derecho a que se le llame ungido del Cristo así como hijo o hija de Dios. Hay quienes, en eras pasadas, se ganaron semejante título y comprometieron esa culminación o no lograron manifestarla en encarnaciones subsiguientes. En esta era el Logos los requiere para que manifiesten su maestría divina interna y la perfeccionen en el plano físico mientras están en encarnación física. Por lo tanto, para asistir a los hijos e hijas de Dios en hacer que su manifestación sea conmensurable con su luz interior, los maestros de la Gran Hermandad Blanca han dado sus enseñanzas a través de los maestros ascendidos y de sus mensajeros en este siglo [XX]. Y Saint Germain fundó la Fraternidad de Guardianes de la Llama, a través de la cual envía lecciones mensuales graduadas a los miembros de esta orden, dedicada a guardar la llama de la Vida en todo el mundo. Antes de pasar con éxito las iniciaciones del discipulado, se hace referencia al individuo como hijito de Dios, en contraste con el término “Hijo de Dios”, que denota la plena cristeidad, en la cual el alma, en y como Hijo del hombre, se ha fundido en el Hijo de Dios siguiendo el ejemplo de Jesucristo.
Con la expansión de la conciencia crística, el ungido del Cristo avanza para alcanzar la realización de la conciencia crística en el nivel planetario y es capaz de sostener el equilibrio de la llama crística para las evoluciones del planeta. Cuando logra esto, asiste a los miembros de la jerarquía celestial que prestan su servicio en el cargo de Instructores del Mundo y al Cristo planetario. Véase Gráfica de tu Ser Divino, Jesús.
Juan 1:1-4; 14:20, 23. Cf. Apocalipsis 3:8; Mateo 28:18; Apocalipsis 1:18