El Godfre estuvo encarnado como Guy W. Ballard, el de . Trajo a la manifestación las enseñanzas de la , la Ley de la , y sostuvo el foco de la para el planeta hasta que ascendió en 1939. Su esposa y fue Edna Ballard, ahora la maestra ascendida Lotus.
El seudónimo de Guy Ballard era Godfré Ray King, hoy conocido como el maestro ascendido Godfre, el Dios Obediencia, pero sigue siendo recordado afectuosamente por sus estudiantes como “Daddy”. Aunque los requisitos de su habían sido cumplidos varios años antes de ascender, se ofreció a continuar al servicio de la Hermandad como su punto de contacto en el mundo de la forma.
Gracias a la ayuda dada por el en la , sus fueron alineados y su equilibrada, capacitándolo para ser el canal de muchos milagros y curaciones antes de su ascensión. Como parte de su último servicio estando encarnado, Godfre tomó sobre sí del mundo y lo expió con su forma física, evitándole así a la humanidad un gran sufrimiento que él mismo eligió llevar, igual que soportó la crucifixión por los pecados de la humanidad.
El momento decisivo de su misión y la clave de su victoria en esa encarnación ocurrió un día mientras iba caminando por Broadway, en Los Ángeles. En aquel momento, cuando todo parecía estar en su contra, se detuvo repentinamente e hizo un fíat al , el remanente de su propia creación humana no transmutada: “Es la última vez que me asustas. ¡No tienes ningún poder!”
Poco tiempo después, en el monte Shasta, conoció al maestro Saint Germain, quien lo llevó a los s de la Hermandad y lo entrenó para su misión en el mundo. Estas experiencias están contenidas en tres libros que más tarde escribiría como una expresión de la llama trina de la conciencia del maestro, Unveiled mysteries (Misterios develados) (el amarillo), The Magic Presence (La Mágica Presencia) (el rosa) y The “I AM” Discourses (Discursos del “YO SOY” o El Libro de Oro de Saint Germain) (el azul).
De Godfre aprendemos que la indefectible obediencia a nuestro ascendido y a la Gran Ley de la Vida es esencial para la victoria individual y para la consumación del calendario cósmico para la . Cada acto de desobediencia retrasa los planes de la Hermandad para la victoria del planeta, una victoria de la que cada persona es responsable individual y colectivamente.
La segunda gran lección que aprendemos de Godfre es que hasta que no derribamos el ídolo de la no comenzamos a escalar la montaña de nuestras iniciaciones. El rechazo del ego y la conciencia humanos debería producirse cada vez que intentan afirmarse. Sólo tenemos que decir: “¡En el nombre de mi poderosa Presencia YO SOY, me niego a aceptar la tiranía de mi conciencia humana!” De otras personas podemos decir: “¡En el nombre de mi poderosa Presencia YO SOY, me niego a aceptar su conciencia humana. Amado Santo , preséntate en tu deslumbrante Realidad y sé la única Presencia actuando aquí!”
Godfre alcanzó su libertad mediante la obediencia a la ley del Ser. Nos enseña a ascender momento a momento elevando nuestros pensamientos y sentimientos, nuestras energías y acciones. La ascensión es la meta de la vida no sólo para unos pocos, sino para muchos.
Godfre estuvo encarnado como hijo del gran rey-emperador (Saint Germain) que gobernó la civilización que floreció en lo que hoy es el desierto del Sahara, hace más de 50,000 años. Guy, su esposa Edna Ballard y su hijo Donald estuvieron encarnados allí como hijos de Saint Germain.
Entre otras de sus encarnaciones fue Ricardo Corazón de León (1157-1199) y George Washington (1732-1799).
OUR GRACIOUS GODFRE
NUESTRO GENTIL GODFRE
Blessings to thee, gracious Godfre
Gentle Obedience, so dear
Showing us Freedom’s great vict’ry
Helping us make our way clear.
Golden-robed brother of heaven
Through us let all thy light shine
Help us, each one, to fulfill his God plan
Wonderful heart-friend divine.
Bendiciones a ti, gentil Godfre
suave Obediencia, tan querido
mostrándonos la gran victoria de la Libertad
ayudándonos a despejar nuestro camino.
Hermano celestial con tu manto dorado
deja que toda tu luz brille a través de nosotros
ayúdanos, a cada uno, a cumplir su plan divino
maravilloso y divino amigo del corazón.
Godfre Ray King, Freedom called thee
“God-free” by pure I AM pow’r
Every lifestream is a “ray,” too
Beamed from the Father each hour.
Light is the king of creation
Raying its beams from God’s heart
Healing, illumining, prospering all
Proving the mast’ry thou art.
Godfre Ray King [Rayo Rey], la Libertad te llamó
“Libre en Dios” por el puro poder del YO SOY
Toda corriente de vida es un “rayo” también
emitido desde el Padre cada hora.
La Luz es el rey de la creación
emitiendo sus rayos desde el corazón de Dios
curando, iluminando, haciendo a todos prosperar
demostrando la maestría que tú eres.
By thy great service to mankind
Saint Germain’s wide open door
There has been drawn to this planet
Love from those gone on before.
Those now ascended in glory
Flood forth their light to all men
Now may the fullness of all in God’s heart
Bless thee again and again.
Por tu gran servicio a la humanidad
puerta abierta de Saint Germain
ha sido atraído a este planeta
el amor de los que se fueron antes.
Los ahora ascendidos en gloria
inundan con su luz a todos los hombres
Que ahora la plenitud de todos en el corazón de Dios
te bendiga una y otra vez.
Great Central Sun and our Helios
Vesta and masters above
Your dispensations of mercy
Pray we for this God of Love.
Let all on earth know his service
Tell them of Freedom’s desire
Make our dear planet at last Freedom’s Star
Victor by violet fire!
El Gran Sol Central y nuestros Helios,
Vesta y los maestros de arriba
vuestras dispensaciones de misericordia
pedimos para este Dios de Amor.
Que todos en la tierra conozcan su servicio
háblales del deseo de la Libertad
¡Haz de nuestra tierra al fin la Estrella de la Libertad
vencedora gracias al fuego violeta!
© The Summit Lighthouse
Filipenses 2:5
Evangelista. El que va delante de los ángeles llevando a los habitantes de la tierra la buena nueva del evangelio de Jesús el Cristo y, en el tiempo señalado, el Evangelio Eterno. Los mensajeros de la Gran Hermandad Blanca en esta era han sido ungidos apóstoles (apóstol: “el enviado en una misión”) por la jerarquía. Entregaron, a través de los dictados (profecías) de los maestros ascendidos y con el poder del Espíritu Santo, el testimonio y las enseñanzas perdidas de Jesucristo a la simiente del Cristo, las ovejas perdidas (las almas dañadas y marcadas por los tiranos y los idólatras luciferinos) de la casa de Israel, y a todas las naciones.
Alguien entrenado por un maestro ascendido para recibir por diversos métodos las palabras, conceptos, enseñanzas y mensajes de la Gran Hermandad Blanca. El que entrega la ley, las profecías y las dispensaciones de Dios a unos hombres y a una era.
[Los mensajeros y maestros espirituales Mark L. Prophet y Elizabeth Clare Prophet, que enseñaron desde una perspectiva única, en una combinación de espiritualidad occidental y misticismo oriental, transmitieron profunda sabiduría y enseñanzas de todos los tiempos sobre el sendero de unión con Dios. Tocaron y transformaron la vida de millones de personas.
Fungieron como mensajeros de la Gran Hermandad Blanca y como portavoces de los maestros ascendidos. Recibieron entrenamiento especial e iniciaciones a lo largo de muchas encarnaciones con el fin de prepararse para este posición en la jerarquía. El papel de mensajero es algo único. Annice Booth, en Memorias de Mark. Mi vida con Mark Prophet, escribe:
“Un mensajero no es un canal ni un médium espiritista; un mensajero está bajo la dispensación de los profetas. En todas las épocas la Hermandad ha tenido lo que llamamos testigos. Ellos son los que escriben la ley, los que suenan la alarma y dan las profecías a la humanidad.
”Dios nunca ha dejado a la humanidad sin mensajeros, sin profetas. Prácticamente han pasado inadvertidos, sin ser escuchados, mientras la civilización y el karma seguían su curso.
”El entrenamiento para mensajero tiene lugar a lo largo de miles de años. No es algo que se obtenga con estudios psíquicos, ni algo que se reciba por el solo esfuerzo. El cargo de mensajero es una asignación y una ordenación.”]
La conciencia o percepción de uno mismo en y como el Cristo; alcanzar un nivel de conciencia conmensurable con el que alcanzó Jesús, el Cristo. La conciencia crística es la culminación dentro del alma de esa Mente que estaba en Cristo Jesús. Es alcanzar la acción equilibrada de poder, sabiduría y amor —del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo– y la pureza de la Madre mediante una llama trina del corazón equilibrada. Es la Fe perfeccionada en el deseo de hacer la Voluntad de Dios, la Esperanza en la salvación de Cristo Jesús gracias al sendero de su justicia realizado en nosotros y la excelencia de la Caridad en el más puro amor de dar y recibir en el SEÑOR.
Filipenses 2:5
El ritual en el que el alma se reúne con el Espíritu del Dios vivo, la Presencia YO SOY. Es la culminación de la estadía divinamente victoriosa del alma en el tiempo y el espacio. Es la recompensa del justo, el regalo de Dios tras el juicio final delante del gran trono blanco, durante el cual todo hombre es juzgado “según sus obras”.
Enoc, de quien se dice que “caminó con Dios, y desapareció, porque le llevó Dios”, pasó por la ascensión; también Elías, quien subió al cielo en un torbellino; y Jesús, aun cuando su ascensión no tuvo lugar en la ocasión en que las escrituras dicen que fue llevado al cielo en una nube. El Morya, maestro ascendido, ha revelado que Jesús vivió muchos años después de estos hechos e hizo su ascensión después de su fallecimiento en Cachemira, a los 81 años, en el año 77 d.C.
La reunión con Dios en la ascensión, esto es, el término de las rondas de karma y renacimiento y el regreso a la gloria del SEÑOR, es la meta de la vida para los hijos e hijas de Dios. Jesús dijo: “Y nadie subió al cielo, sino el que descendió del cielo, incluso el Hijo del hombre.” Por medio de la salvación (inglés: salvation), la “autoelevación” (inglés: Self-elevation), o sea, la elevación consciente del Hijo de Dios dentro de su templo, el alma se pone el vestido de bodas para realizar la función del Hijo (inglés: Son, o Sun [sol], o luz) de la manifestación (inglés: man: hombre): el Hijo del hombre. Siguiendo el sendero iniciático de Jesús, el alma, habiendo saldado su karma y cumplido su plan divino, se fusiona con la conciencia crística y después con la presencia viva del YO SOY EL QUE YO SOY. Una vez que la ascensión ha tenido lugar, el alma, el aspecto corruptible del ser, se convierte en el incorruptible, un átomo en el Cuerpo de Dios. Véase matrimonio alquímico.
Apocalipsis 20:12-13; Génesis 5:24; 2 Reyes 2:11; Lucas 24:50-51; Hechos 1:9-11; Juan 3:13
La llama del Cristo, la chispa de la vida que arde en la cámara secreta del corazón de los hijos e hijas de Dios. La sagrada trinidad de poder, sabiduría y amor que es la manifestación del fuego sagrado. Véase Gráfica de tu Ser Divino.
(sánscrito: “acto, acción, obra”). El karma es energía/conciencia en acción; la ley de causa y efecto y retribución. Llamada también ley del círculo, que decreta que cualquier cosa que hagamos completará un círculo y regresará a nuestra puerta para resolución. Pablo dijo: “Todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.” Newton observó: “Para toda acción hay una reacción igual y opuesta.” La ley del karma requiere que el alma reencarne hasta que todos los ciclos kármicos se hayan saldado. Así, de una vida a la siguiente el hombre determina su destino por sus acciones, incluyendo sus pensamientos, sentimientos, palabras y obras. Saint Germain enseña el sendero acelerado de la transmutación del karma con la llama violeta del Espíritu Santo y trascendiendo las rondas de renacimiento a través del sendero de la cristeidad individual que conduce a la ascensión demostrada por Jesús.
Gálatas 6:7
Término utilizado a veces para designar al anti-yo, al no-yo, al yo sintético, la antítesis del Yo Real, el conglomerado del ego autocreado, erróneamente concebido debido al uso incorrecto del don del libre albedrío, compuesto por la mente carnal y una constelación de energías contaminadas, campos de fuerza, focos y magnetismo animal que conforman la mente subconsciente.
Muchos de los retiros de los maestros, incluyendo sus escuelas de misterios, estuvieron en el plano físico durante las primeras eras de oro de la tierra e incluso después de la Gran Rebelión y la Caída de los ángeles caídos. Ante la destrucción y la profanación de sus templos, los maestros retiraron sus centros y sus llamas al plano etérico, de ahí el término “retiro”. Después de la ascensión del mensajero Mark L. Prophet el 26 de febrero de 1973, los Señores del Karma dieron otra oportunidad a los hijos de Dios de saldar su karma asistiendo a las clases en los retiros de los siete chohanes, el Maha Chohán y los Instructores del Mundo. El primero de enero de 1986, Gautama Buda y los Señores del Karma respondieron a la petición de los Señores de los Siete Rayos de abrir las universidades del Espíritu que se encuentran en sus retiros etéricos a decenas de miles de estudiantes para proseguir sistemáticamente el camino de la automaestría en los siete rayos. Los estudiantes viajan en su cuerpo sutil durante el sueño y pasan catorce días en el retiro de cada uno de los chohanes y del Maha Chohán. Véase Tabla de los ocho rayos.
Ciclo de iluminación, paz y armonía en el que las almas de la humanidad se fusionan en la Llama del Cristo para el cumplimiento del plan divino, “como Arriba, así abajo”. A través de la convergencia del plano etérico y la capa etérica con los tres vehículos inferiores del cuerpo planetario y sus evoluciones, el reino de los cielos se manifestará en la tierra tal como ya existe ahora en la octava etérica. Véase cuerpo etérico.
“Era de oro significa una era basada en el patrón oro –el patrón del oro de la conciencia crística, de la regla de oro, del oro como luz del sol precipitada para el equilibrio de la mente y de las emociones y para el flujo de la vida incluso en el plano físico” (Dios del Oro).
La conciencia que percibe al ser como humano: limitado, mortal, caído, pecaminoso, expuesto al error y a las pasiones de los sentidos, y que por tanto declara con el Hijo del hombre: “No puedo yo de mí mismo [humano] hacer nada. Mas el Padre [la Presencio YO SOY] que está en mí, Él hace las obras del SEÑOR.”
Juan 5:30; 14:10